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Hoy estoy jodida, falto que me cagara una paloma o algún gracioso escupiera de algún edificio con un millón de ventanitas. Y es que la puta gente no tiene nada que hacer y corta calles y suspende servicios, y nose parece que hay un show o una especie de evento o vaya a saber uno qué coño es pero se siente música realmente molesta en mi habitación y si cierro las ventanas muero de calor y el ventilador hace un ruido espantoso.
Y yo, yo no tengo sueño, y tengo los ojos abiertos y grandes, la pupila dilatada el pelo hecho un nudo y sigo aca, es que necesito escribir, hablar, gritar. Y vos me haces llorar, lloro desnuda, totalmente desnuda mientras me besas la planta de los pies y sabes que me excita, muy bien lo sabes, mientras te miro con los ojos grandes y la pupila dilatada de tanto llorar y casi te trago. Es que ya no quiero parar. Y la puta música del parque sigue sonando, ahora que me acuerdo, debe ser lo del folleto que me dio ese chico al cual me acerqué, me sonrió le sonreí y ahí acabo nuestra historia de amor, el folleto decía algo de navidad, y es que todo el mundo se revoluciona con esto de la navidad y yo me desgarro como todos los diciembres! Quiero ver alguna película pero siempre que quiero ver una, nunca encuentro algo que sostenga mi atención por más de 2 min. Es que sí, realmente hoy estoy jodida, irritable.. no paran de fluír cosas de esta cabeza, mi cabeza y me rio, me rio de un chiste de Javier, que créanme se los contaría pero no me acuerdo y me rio, me altera reir porque sí y me gusta reír sin motivo. Me contradigo, tengo a dos parlanchines dentro mío, yo soy esos dos parlanchines uno blanco y el otro negro, uno tranquilo y el otro inquieto, uno tiene ojos brillantes y sonrisa de ángel, el otro todos los pelos parados y el ceño fruncido, y ¿saben qué? ¿saben? Me vuelven loca, me sacuden, me hacen pensar, escribir, reir y querer gritar. Me enamoran.
Y hoy fue la primera vez que sentarme en un banco me dio tanta felicidad, en realidad fue porque la miraba a ella desde arriba sudando, bien agarrada de la camilla y queriendo patalear pero tan felíz como yo. Y sigo jodida. Jodida y contenta, contenta y jodida, y no paro de llorar mientras me excitas.